La venta libre de productos antiácidos ha provocado que haya un abuso por parte de la población en su uso y abuso. Esta en manos del profesional de la salud brindar la información pertinente a los pacientes para evitar malas prácticas.
Las comidas abundantes y apresuradas, los abusos en el consumo de café, tabaco, refrescos y bebidas alcohólicas, así como de alimentos excesivamente condimentados, picantes y grasosos, conllevan a un elevado consumo de antiácidos.
Estos malos hábitos alimenticios han disparado los casos de personas con acidez intermitente, lo que ha convertido a este problema en una de las causas de atención médica más comunes.
Los antiácidos se han usado desde hace mucho tiempo en el tratamiento de molestias provocadas por el exceso de ácido en el estómago, como reflujo gastroesofágico, ardor en el estómago y otras molestias digestivas.
Médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social alertaron sobre el consumo prolongado y excesivo de antiácidos, usualmente contra el reflujo gastroesofágico o la úlcera péptica, que elevan el riesgo de padecer osteoporosis, fracturas y alteraciones renales.
Se calcula que el que 25 por ciento de la población ingiere antiácidos al menos una vez a la semana, la mayoría sin prescripción médica.
Aunque suelen ser fármacos con amplio margen de seguridad, sólo son sintomáticos, no curan, su efecto dura poco, y para quienes los toman con frecuencia, su consumo constante y prolongado puede acarrear problemas del sistema óseo y litiasis renal. Estos efectos, generalmente se manifiestan después de consumir antiácidos por cinco años o más.
FUENTES:
https://sumedico.com/antiacidos-en-exceso-pueden-afectar-huesos-y-rinones/
http://www.elfinanciero.com.mx/tech/antiacidos-en-exceso-te-podria-pasar-esto